Federico Falco dice que al escribir uno toma una decisión con respecto a su modo de leer. Es, dice, como si a una persona que disfruta de las montañas rusas se le planteara la disyuntiva: ¿querés subirte a la montaña rusa o querés diseñar montañas rusas? Las dos cosas pueden satisfacerlo, pero no hay dudas de que son actividades distintas (y que no pueden hacerse al mismo tiempo).
Es una metáfora muy gráfica para algo que en la experiencia se presenta más bien difuso, creo que a causa de que los verbos leer y escribir pueden significar muchas cosas.
Quienes nos lanzamos a la escritura creativa leemos con la mirada estrábica: un ojo sigue el recorrido que propone el texto, mientras que el otro se fija en cómo está hecho, en su estructura, en la forma en que se articulan los elementos, y demás.
Leer como escritores es hacer ingeniería inversa a partir de un material. No es matar el placer de la lectura, sino, frente a un texto que me gusta (o me conmueve, me indigna, o lo que sea), preguntarme qué hay en eso, que no es más que una serie finita de palabras una detrás de la otra, para producir lo que produce. Puede tener que ver con decisiones al ordenar los acontecimientos, con un trabajo en el punto de vista, con una resonancia deliberada en otro texto que conozco, con un uso particular del lenguaje, un recurso gráfico, un tratamiento de las voces narrativas, un contraste de imágenes, un eco de sonidos en el texto, cierto manejo de la tensión, etcétera.
Lo que en una primera lectura puede aparecer como algo mágico, en realidad es una estrategia del texto, que se puede identificar y, claro, sumar a la caja de herramientas propia.
La consigna de esta semana es releer un cuento o poema que te guste, identificar en él algún recurso narrativo o poético y escribir un texto con ese recurso.
Vamos. Mucha suerte, y a trabajar.
Saludos,
Ariel
PS. Podés encontrar las consignas pasadas acá.
PS. 2. Una de las partes que más me gustan de mis talleres es cuando cada uno trae algo que leyó o una película o serie que vio en la semana, y juntos tratamos de encontrar ahí recursos que nos sirvan para escribir. Creo que, para aprender a escribir, ese modo de leer es mucho más poderoso que cualquier bibliografía obligatoria. El próximo lunes empieza un nuevo grupo. Todavía quedan algunos lugares: Taller virtual de Iniciación a la Escritura Creativa.